Jueves 24 de Agosto de 2017
Se recordó al actor José Mojica como un ícono fugaz del cine mexicano
Luego de su exitosa participación en una ópera de Chicago, José Mojica comenzó su carrera en Hollywood durante la década de los treinta. La potencia de su voz y la delicadeza de sus facciones generaban en su persona un magnetismo natural. Al regresar a su natal México, el tenor trabajó con grandes directores de la Época de Oro, como Arcady Boytler; sin embargo, la fugacidad de su trayectoria artística se consagró cuando, al prepararse para el papel de un fray franciscano en la cinta Melodías de América (Eduardo Morera, 1942), renunció al mundo de la actuación para ser fraile, convirtiéndose así en un mito.
Con el motivo de difundir la inusual historia de Mojica, Jesús Ibarra -catedrático de la Universidad de León- realizó una publicación en la cual explora la trayectoria del actor antes y después de su paso por el séptimo arte. José Mojica: Dulce renunciación es el título de la obra, presentada este martes 22 de agosto en compañía de Oswaldo Mejía, investigador de la UNAM, y Jorge Fink, actor de teatro, cine y televisión. El evento tuvo lugar en la Sala 4 Arcady Boytler de la Cineteca Nacional.
Hombre, artista y fraile (1944), de Luis Spota, es la única referencia bibliográfica que existía acerca del fenómeno que constituyó el cantante y actor, razón por la cual Ibarra decidió develar, a través de una investigación documental, los motivos del artista para renunciar a su carrera. "Siempre me inspiró curiosidad su misticismo espiritual y decidí escribir este libro después de que fui contactado por las monjas del Santuario Hogar Guadalupano (Mexiquito), el cual fue fundado por Mojica", declaró el autor.
Durante el evento, fue leído un texto del productor y director Roberto Fiesco, quien formó parte del proceso editorial del libro: "la obra denota la pasión por darle nuevas lecturas a la realidad a través de datos inéditos, mucha documentación y fascinación por el personaje por parte del autor", señaló en su carta. Asimismo, se hizo referencia al valor definitivo que posee José Mojica: Dulce renunciación como publicación: "al escarbar la memoria y organizar estas vivencias, el recuerdo del artista podrá perdurar muchos años más".
Por su parte, Fink rememoró los días en donde, al iniciar su carrera, conoció a Mojica: "fue un gran actor y sobre todo una excelente figura. Es lamentable que haya dejado su carrera artística, pues tenía mucho talento. Agradezco que se hagan publicaciones como ésta para preservar su memoria", sostuvo. Asimismo, Mejía agradeció a Jesús Ibarra por invitarlo a realizar la investigación documental del libro. "Siempre es un gusto participar en un proyecto sobre cine mexicano".
De acuerdo con el autor, el nombre del libro se titula «Dulce renunciación» debido a la letra de la canción Solamente una vez que le compuso Agustín Lara a José Mojica durante el rodaje de la cinta argentina Melodías de América. "Lara fue la primera persona en saber que se retiraría de la vida pública y, por el respeto que le tenía, le dedicó esa canción como despedida". Además, el autor señaló que después de su participación en la película, todas sus apariciones en la pantalla grande fueron en beneficio de su iglesia.
En ese sentido, el académico señaló que su móvil para realizar esta investigación, más allá del valor documental, fue brindarle ayuda al orfanato fundado por Mojica en San Miguel de Allende. "Todas las ganancias de este libro son para la Casa Hogar Mexiquito, en donde también se busca realizar un museo en su honor, pues se ha convertido en un mito de la cinematografía mexicana", afirmó.
AGO