Martes 12 de Septiembre de 2017
Analizan al antihéroe como el punto medular de la literatura de Patricia Highsmith
El odio, la envidia y la psicopatía son, según el escritor mexicano Iván Farías, los motivos literarios que reflejaron las etapas más difíciles de la vida de Patricia Highsmith, controvertida novelista y autora de obras como Extraños en un tren (Strangers on a Train, 1950) y El talentoso Sr. Ripley (The Talented Mr. Ripley, 1955), y que quedaron mejor representados en la figura del antihéroe, a quien utilizó como el punto medular de historias que exponen la maldad existente dentro del ser humano.
Continuando con el ciclo Charlas de cine y literatura dedicado a Highsmith, el columnista de Playboy México analizó los personajes predilectos de la escritora durante una charla que tuvo lugar el 11 de septiembre en la Sala 4 Arcady Boytler de la Cineteca Nacional, después de la proyección de Aguas profundas (Eaux profondes, Michel Deville, 1981), cinta francesa basada en la novela Mar de fondo (Deep Water, 1957).
La ponencia comenzó con la lectura de un fragmento de un diario de Highsmith: “Mis textos favoritos son las biografías y los periódicos. Si un escritor de suspenso escribe sobre asesinatos y víctimas debe retratar algo más que la brutalidad de la sangre derramada. Debe estar interesado en la justicia de este mundo y en la ausencia de la misma; en la cobardía y el coraje humano. En pocas palabras, sus personajes ficticios deben parecer reales”, citó Iván Farías.
Para Highsmith era importante que sus villanos fueran carismáticos y tuvieran una buena imagen dentro de la sociedad; ellos gustaban del arte, practicaban deporte, siempre andaban bien vestidos y formaban parte de la alta sociedad. “Lo más valioso de la obra de Highsmith es la manera en la que logra que el lector se enamore de sus personajes. Pese a su inestabilidad emocional, son personas de etiqueta, cultas y educadas; esto hace que te identifiques con ellos y te vuelvas cómplice de sus crímenes”, mencionó.
Por otra parte, el ponente comentó que los antihéroes se ven obligados a cruzar la línea que separa al bien del mal. En este sentido, sus personajes no cometen crímenes a primera instancia, sino que lo hacen como un mecanismo de defensa. Sin embargo, después de cometer el primer delito, éstos no tienen problema en seguir haciéndolo, reflejando la facilidad que tiene la sociedad para corromperse.
Para finalizar, Farías declaró que Highsmith recurría a la ambigüedad moral de sus protagonistas para hacer una crítica a la hipocresía de mostrar a un criminal como una persona común. El escritor comentó que los personajes más oscuros dentro de los textos de la norteamericana se comportan de manera correcta en sociedad a pesar de ser perpetradores de crímenes atroces.
El ciclo Charlas de cine y literatura continuará a lo largo de septiembre en la Cineteca Nacional. El lunes 18 se exhibirá Las dos caras de enero (The Two Faces of January, 2014), adaptación del realizador iraní Hossein Amini, y se contará con la presencia de la escritora Aniela Rodríguez. La proyección se realizará en la Sala 4 a las 18:00 hrs. y la entrada será libre, solicitando cortesías de acceso en la taquilla 5.
JHS