Miércoles 16 de Diciembre de 2009

El chico de Charles Chaplin, a ritmo de los hermanos Arreola

Fue en el mes de julio cuando dio inicio Bandas Sonoras: Cine mudo a ritmo de rock, un proyecto innovador que desde la primera función resultó ser todo un éxito entre los jóvenes y no tan jóvenes amantes del cine. Para cerrar este 2009, el pasado 12 de diciembre la Cineteca decidió proyectar El chico (1921), de Charles Chaplin, musicalizada nuevamente por los hermanos Chema y Alonso Arreola. 

No obstante, ahora el reto era aún mayor, ya que se habían programado dos funciones a las 19:00 y 20:40 horas. "Dame un poco más de volumen, Lalo", le decía Chema Arreola a su ingeniero de sonido previo a las proyecciones... Mientras, su hermano Alonso terminaba de afinar los últimos detalles de lo que sería el guión para todo el equipo de producción, en el que se tenía contemplado repartir entre los presentes sus ya famosos silbatos para hacerlos sonar durante las escenas donde la policía aparece.

Además, ambos comentaron que durante la función no se pronunciaría una sola palabra, ya que la comunicación por parte de los músicos sería a través de unos carteles que ya se tenían listos: primero la presentación de Chema y Alonso, para después mostrarle al cácaro un cartel con la leyenda "fuera luces" que indicaba que la función estaba a punto de comenzar.

Desde niños hasta el clásico rockero con chamarra de cuero y gafas oscuras, pasando por personas de la tercera edad, conformaban el público asistente. Todos se encontraban listos para comenzar a desfilar por la sala y tomar sus lugares, previa compra de las clásicas palomitas. Sólo esperaban que se diera el banderazo inicial por parte de los músicos para disfrutar de la función.

Así, a las 19:00 horas dio inicio la primera presentación, cuyo anfitrión fue Miguel Solís, gerente de la estación 7Diez del IMER. Con una música intensa, una batería potente, grandes efectos y grandes solos en el bajo, la película transcurrió con el brillante acompañamiento de los hermanos Arreola. Al final, los músicos mostraron más carteles de agradecimiento a su equipo de trabajo, a su ingeniero de sonido, al público y por último a la Cineteca, a la que bautizaron como "Cineteca Rock".

Mario Ortega

Cineteca Nacional