Jueves 18 de Abril de 2024
50 años de Cineteca Nacional, presentación editorial
Cinéfilos, investigadores, estudiosos del cine, expertos en áreas de preservación, restauración, conservación, historia, programación y algunos directivos, planearon el esquema del libro y su estructura con el objetivo de crear un libro que le hablara al lector acerca de lo que es una cineteca, cuáles son sus diversas áreas y cómo se han desarrollado a lo largo de 50 años de vida.
El resultado, se articula como una obra compuesta de memorias ilustradas con fotografías provenientes de sus acervos; seleccionadas de entre cientos de imágenes análogas y digitales. Presentado por Catherine Bloch, subdirectora del Centro de Documentación e Investigación, Vicente Cázares, director de Administración y Finanzas, Nelsón Carro, director de Difusión y Programación, Edgar Torres, director de Acervos y Alejandro Pelayo director general de la Cineteca Nacional, este es un trabajo conjunto que rinde homenaje a la historia de la Cineteca y a quienes han transitado por ella.
Resulta inherente hablar sobre los inicios, los primeros años de la Cineteca, con la pionera Elena Sánchez Valenzuela; actriz, periodista y directora de cine, quien promoviera la existencia de la Filmoteca Nacional, dependiente de la SEP. Su lucha influyó para que en la Ley de la Industria Cinematográfica de 1949 se contemplara la creación de una Cineteca Nacional. Años después, en 1974, la creación de la Cineteca Nacional en México fue una realidad, construyendo sus cimientos en un foro de los Estudios Churubusco, cuya historia termina con el incendio que tuvo lugar en este sitio ocho años después, pero que dio vida a la Cineteca Nacional que conocemos en la actualidad.
Durante la presentación, Catherine Bloch, subdirectora de investigación de acervos, enfatizó el importante papel que han desarrollado las mujeres en la Cineteca desde sus inicios. “Destacamos el impulso que significó la labor de Elena Sánchez Valenzuela, habiendo logrado en 1942 ser nombrada encargada de la Filmoteca Nacional dependiente de la SEP. Su lucha influyó para que en la Ley de la industria Cinematográfica de 1949 se contemplara la creación de una Cineteca Nacional, en homenaje a esta pionera le dimos su nombre a nuestro laboratorio de restauración digital. Tuvieron que pasar más de 30 años desde 1942 que ella la creó, para que el gobierno mexicano le diera realmente vida a este sueño, construyendo y creando en el 74 la Cineteca Nacional. En las grandes cinetecas de primer mundo, son muy pocas las que han dado puestos directivos a muchas mujeres, un aplauso a esta institución que desde el principio le dio su lugar a las mujeres.”
También, hizo especial mención y agradeció al personal que conforma al área operativa, aquellos que reciben a los espectadores día tras día y gracias a los que Cineteca Nacional funciona de manera efectiva.
Jorge Carlos Sánchez y Catherine Bloch del Centro de Documentación, fungieron como coordinadores de este libro con el apoyo de Gustavo Ramírez en la revisión y edición de los 16 textos y de Patricia Talancón en la selección de fotos, así como la aportación en el diseño editorial de David Guerrero, por solo citar a algunos de los muchos compañeros que vertieron sus valiosas experiencias en este libro.
En el segundo capítulo, se describe la etapa en que se desarrolla Cineteca Nacional de 1984 a 2012, año en que cambió por completo la fisonomía de la Cineteca al construir nuevas salas, un techo, el estacionamiento, un laboratorio de restauración y las bóvedas. Otro momento de gran impacto en la Cineteca descrito en el libro, fue lo sucedido ante el Covid-19, una pandemia que provocó el alejamiento de un público que rebasaba ya el millón 200 mil visitas anuales, por supuesto, este suceso también forma parte importante de la historia de la Cineteca Nacional.
A lo largo de estos años, la labor histórica de las publicaciones y la extensión académica, libros y cursos que ahora ya son fundamentales para la Cineteca y sus públicos, así como las exposiciones que este espacio ha albergado en los últimos 25 años; los textos que nos introducen a la programación, la red de exhibición nacional: Circuito Cineteca; la formación de públicos y la comunidad de cinéfilos, —que han surgido gracias a un espacio que abre sus puertas y sus actividades a todo el público que gusta del cine de autor— nos habla de la exitosa labor de difusión y creación de públicos que Cineteca Nacional ha conjugado alrededor de 50 años.
Por su parte, el director general Alejandro Pelayo, compartió su experiencia como parte de una institución que ha sido parte importante dentro de su vocación: “Se celebran 50 años de continuación de la Cineteca Nacional, porque a pesar del trágico incendio que vivió en 1982, fue un proyecto que siguió avante, no se descontinuó, es un flujo de gente que se ha dedicado a la Cineteca y se han conservado los criterios de programación de un cine de búsqueda artística, de un cine más autoral, con diferentes matices, matices de Paula orientados más hacia las nuevas generaciones de cineastas, mi matiz más hacia los clásicos, matices dentro de un esquema fundamental que permitió la continuidad y lo que da fortalecimiento es la continuidad.”
Hoy día, la Cineteca Nacional México pasó de tener solo dos salas (la Fernando de Fuentes y el Salón Rojo) a ser un conjunto cinematográfico compuesto por diferentes sedes: Cineteca Nacional México, Cineteca Nacional de las Artes y la que próximamente será su tercera sede, Cineteca Nacional Chapultepec, con la mira siempre a abrir más ventanas de exhibición para el cine de arte nacional y extranjero. El libro “50 años de Cineteca Nacional” se encuentra a la venta en la tienda del recinto.
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