El pasado jueves 24 de mayo en Cineteca Nacional México se llevó a cabo la premier del documental Pax in Lucem (2024) y la presentación al público de “Torres García; Universo humano”, exposición que explora el legado artístico del artista plástico Joaquín Torres García. En el acto inaugural participó Marina Stavenhagen, directora general de Cineteca Nacional; Santiago Wins Arnabal, embajador de Uruguay en México; Emiliano Mazza De Luca, director de cine y Alejandro Díaz Lageard, curador de exposición “Torres García; Universo humano” en México.  

El fuego era recurrente en la vida de Joaquín Torres García. En 1925 la fábrica neoyorquina donde producía juguetes de madera se incendió. Una década después, en 1936 se incendió la Capilla del Santísimo de la Iglesia de San Agustín en Barcelona y seis de sus grandes lienzos con ella. También durante “El Bogotazo” de 1948 se prendieron fuego a dos de sus obras. El último golpe llegó en 1978.  

Torres García nació en Montevideo en 1874. Fue integrante de las vanguardias artísticas americanas y europeas. La necesidad de poner un componente humano, afectivo y ancestral en el arte, lo distanció de la abstracción pura y dio vida a su propio sistema, el Universalismo Constructivo.  

Su mayor pérdida fue la madrugada del 8 de julio de 1978. El Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro se incendió. 150 cuadros fueron pérdida total y 930 más gravemente dañados. El uruguayo fue el más afectado. 73 sus obras, realizadas entre 1928 y 1945, fueron totalmente consumidas por las llamas. Entre ellas el mural Pax in Lucem. “Lo que se perdió no merece ser considerado en dinero. Lo que se perdió fue el arte de América”, lamentó entonces Manolita Piña de Torres García, viuda del pintor.  

30 años después del desastre se abrió el sarcófago. Los restos de la obra fueron encontrados en una caja guardada en el depósito del Museo Nacional de Artes Visuales. Alejandro Díaz, con una visión utópica, se embarcó en la restauración y realización de una réplica de dicho lienzo. En palabras del bisnieto “es el mural que siempre emerge”. Así como en un viaje por los secretos de la vida de sus antepasados y lo que tal pintura representaba para su bisabuelo. “Tanto la muestra como la película son una manera que tengo de elaborar el duelo de eso que viví con mi familia en 1978”, declaró Díaz.   

Por su parte el documental Pax in Lucem (2024), dirigido por Emiliano Mazza De Luca, muestra la travesía de la restauración de la, posiblemente más conocida, obra del pintor uruguayo Joaquín Torres García. La película también busca compartir la visión y propósito artístico del pintor. Como mejor lo resume Santiago Wins Arnabal, embajador de Uruguay en México: “El documental... no solo recorre su vida, no que también su lucha por construir un arte auténticamente latinoamericano.”   

La película, así como la exposición complementaria montada en el lobby de la sala 2, pueden observarse en la Cineteca Nacional México durante este mes de mayo. Consulta la programación en www.cinetecanacional.net